Prensa Paúl Venezuela –
Hace al menos dos años la ONG Paúl Venezuela logró enviar un juego de prótesis de piernas a la ciudad de Maracaibo. Eran en total 4 prótesis para adultos. Fueron donadas al Hospital Clínica San Rafael, una de las referencias nacionales en ortopedia e institución receptora de los aportes en material médico que gestiona nuestra organización.
Aquella fue una ayuda pequeña pero que mejoró la vida de los pacientes a quienes fueron entregadas. Las prótesis en cuestión fueron donadas en Madrid, aliados de la ONG habían adelantado la gestión para que fuese nuestra organización la encargada de enviarlas a Venezuela. Y así se cumplió.
Un publicarse su entrega en el Hospital Clínica San Rafael en redes y web, las solicitudes comenzaron a llover en nuestros mail, mensajes directos desde Facebook, Instagram, Twitter, e incluso en mensajes directos a teléfonos de la organización. Las peticiones no han parado desde entonces.
La situación nos ha llevado a indagar un poco más de cerca la situación de los pacientes que se comunican y la constante es una: En Venezuela es casi imposible conseguir una prótesis. ¿Pero qué más han dicho?…
Generalmente las respuestas recogidas tras cruces de mails y mensajes es que la falta de asistencia en salud pública ha repercutido durante años en esta materia. Claramente otro síntoma del colapso total de la salud en Venezuela.
Los precios, en un país dolarizado espontáneamente, hacen prácticamente inalcanzable la adquisición de una prótesis para cualquier ciudadano, incluyendo a niños que han pasado por el trauma de perder un miembro. Otro impacto directo de la inflación, la escasez de producción y la falta de innovación en materia de salud en el país con las mayores reservas de petróleo del mundo.
Miguel Ángel Campos, sociólogo venezolano y miembro del Consejo Técnico de la Cátedra Libre Integración de Personas con Discapacidad, de la Universidad del Zulia, confirma que en Venezuela, tener acceso a una prótesis, es muy complejo.
«Es un drama, son equipos muy costosos. Incluso los precios de los materiales para la fabricación de prótesis son elevadísimos», dice, y afirma que hace algún tiempo permanecía activa la Fundación Larense de Ayuda al Incapacitado (FLAI), en el Hospital Central Universitario Antonio María Pineda, de la ciudad de Barquisimeto, estado Lara, donde elaboraban las cuencas de las prótesis para pacientes, pero no hay certeza de que sus operaciones sigan al mismo ritmo de años anteriores. Esta fundación respondía a solicitudes de todo el país.
Se ha intentado acceder a reportes de la fundación, pero de momento no ha sido factible. Tampoco hay sitios web o información de contacto con la organización.
Iniciativa de la ONG Paúl Venezuela
En vista de las crecientes peticiones de ayuda con prótesis, miembros de la ONG Paúl Venezuela han acordado impulsar contactos con fabricantes de prótesis con el fin de tener acceso donaciones de equipos que puedan ser enviados a Venezuela.
Un punto importante a destacar es que todo equipo de este naturaleza es personalísimo, dada las medidas corporales de cada paciente, y este sería uno de los retos que supone la iniciativa.
«Estamos en plena disposición de buscar las formas correctas de obtener donaciones de empresas fabricantes, pero que a su vez sean equipo efectivos para los pacientes en Venezuela, que acoplen perfectamente en los cuerpos de nuestros pacientes. Sabemos que las distancias suponen una dificultad, pero trabajaremos de cerca con especialistas para poder llevar a buen término el objetivo», señaló Carlos Moreno, presidente de la ONG en España.